lunes, 11 de febrero de 2008

LO IMPORTANTE DEL 14

Hasta hece un par de días, tenía pensado hablar acerca del día del amor y de cómo esta fecha, como muchas otras, se ha convertido en una excusa para consumir y en un lucrativo negocio para los comerciantes de nuestro país.


Sin embargo, Cristián Warnken lo hizo de nuevo, con su último artículo, publicado el jueves 07 de febrero en El Mercurio, logró tocar en mí esa fragil, escurridiza y sentimental fibra que sólo se deja acariciar por las letras de unos pocos.


De lo que trata Warnken en su columna, es acerca del amor que éste siente por su esposa. Es una especie de declaración de amor salida desde lo profundo de las entrañas del poeta.


Es así como he decidido cambiar lo que pensaba escribir, un tanto negativo acerca del tan manoseado y descontextualizado "14 de febrero", es más haré una apología de este día, ya que si bien es cierto que se presta para el consumo y para que las grandes tiendas se hagan ricas, también hace que dejemos de ser sólo hombres o mujeres y nos convirtamos en amantes, en cómplices, aunque sea por un día, día en el que volvemos a enamorarnos no sólo de nuestra pareja, sino también de los seres humanos y de su eterna capacidad de amar, día en que las palabras o las cartas de amor fluyen como nunca, fáciles de las manos y bocas de cientos de personas en todo el mundo, día en que todo parece andar mejor y en el que sonreimos más de lo habitual.


Bueno, en realidad no sé si sea tan así, pero si es que esto es lo que le pasa al menos a una persona en este país... creo que sería un provechoso y fantástico día.