jueves, 14 de febrero de 2008

MEDIO AMBIENTE CAPITALISTA

Increíble, lo que acabo de leer en El Mercurio se pasó. El señor Álvaro Bardón en su columna realmente se pasó.
Este señor, plantea que la solución al problema del medio ambiente es, precisamente, su mayor causa... el sistema capitalista.
En su columna postula que los pobres, al estar preocupados de conseguir comida para sus hijos, no piensan en cuidar el medio ambiente en que viven. Por ello, plantea que la mejor opción para proteger a nuestro planeta de la contaminación es que los pobres obtengan más recursos, se olviden del hambre, comiencen a mirar a su alrededor y a preocuparse por la problemática ambiental (planteamiento que me recuerda mucho a la pirámide de necesidades de Abraham Maslow).

Pues bien, el problema fundamental de su planteamiento es proponer que el sistema capitalista es el adecuado para que los pobres se enriquezcan. El capitalismo no enriquece al pobre, sino al rico. El sistema hace que el pobre sea cada vez más pobre, haciéndolo consumir más de la cuenta, incluso más que los propios salarios de los trabajadores.

Que el capitalismo sea el salvador del planeta, según mi opinión, es falso y contradictorio, ya que desde la revoluvión industrial a la fecha, la contaminación ambienta ha ido en aumento al ser reemplazada la mano de obra por la maquinaria industrial (más contaminante). Hoy, el sistema capitalista no podría sobrevir sin las industrias, es decir, necesita contaminar el ambiente para existir.

Además, son los empresarios capitalistas, con mucho dinero, quienes se oponen a las políticas pro ecológicas, tendientes a reducir los niveles de polución emanados por las grandes industrias, es decir, es falso que a mayor dinero que posean las personas, mayor será su conciencia ambiental.

El país capitalista por excelencia, EE.UU es uno de los mayores en cuanto a producción de contaminación a nivel mundial.
Por último, en cuanto a que en EE.UU y en países europeos (no comunistas) hay espacios libres de contaminación, esto es así sólamente porque las potencias industriales del planeta prefieren traer sus industrias a países como el nuestro, tercermundistas, para así no contaminar dentro de sus fronteras.
¿Este señor creerá que somos tontos?
En fin, la columna de Bardón me hizo recordar a Mr. Mercado del que habla Rodrigo.